Teniendo en cuenta que la situación internacional se vio gravemente alterada por los atentados del 11 de septiembre de 2001, sufriendo una recesión que afectó especialmente al sector turístico, el balance del ejercicio 2002 del Museo Guggenheim Bilbao se puede considerar positivo. Tras un primer cuatrimestre de menor afluencia de público, en el resto del año los niveles de visitantes se han situado en cifras similares o incluso superiores a las del año 2001.